Por Reinaldo Millán de INS para Noticias Sur P.R.
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Yauco, 13 ene (INS).- Cuatro monjas de la Congregación de las Hermanas Dominicas de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, se encuentran sanas y salvas, informó hoy la madre superiora sor Celeste Ortiz García.
Las hermanas sor Inocencia Olmedo, de San Lorenzo; Agustina Laboy, de Boston; María Belén Negrón, de Aibonito, y Benedicta Laguerre, de Haití, se encuentran en una misión en el pueblo Pignion, en el distrito de Cabo Haitiano en el departamento del Norte de Haití, zona que no sufrió daños aunque sintieron el remezón.
“Gracias a Dios, están bien”, dijo sor Celeste a Inter News Service luego de que durante todo el día estuvieran preocupadas por las monjas que realizan su obra en la empobrecida nación caribeña que fue azolada por un sismo de categoría 7.3 en la escala Richter, dejando terror y confusión en las calles de Puerto Príncipe.
“Gracias a Dios el lugar donde estaban no sintió los efectos del temblor, las estructuras donde estaban ellas no se afectaron”, confirmó a INS.
Sor Celeste indicó que Laguerre es la primera haitiana que forma parte de la Congregación fundada por Madre Dominga Guzmán Florit en 1949.
La Madre Superiora relató que las hermanas se trasladarán de Pignion a otra localidad donde puedan ofrecer ayuda en la nación cuya religión principal es la católica, que constituye el 60 por ciento de la población haitiana, aunque hay mucho sincretismo.
El apostolado de la congregación es servir en la Iglesia a todos los hombres, en particular atendiendo a los más necesitados, visitando a los enfermos y a los pobres, comprendida la pobreza material y espiritual, evangelizando a los niños, jóvenes y adultos, realizando obras de acción religioso-social.
De acuerdo con informes internacionales, se estima que la cifra de muertos debe estar entre 100.000 y 500.000. INS
Las hermanas sor Inocencia Olmedo, de San Lorenzo; Agustina Laboy, de Boston; María Belén Negrón, de Aibonito, y Benedicta Laguerre, de Haití, se encuentran en una misión en el pueblo Pignion, en el distrito de Cabo Haitiano en el departamento del Norte de Haití, zona que no sufrió daños aunque sintieron el remezón.
“Gracias a Dios, están bien”, dijo sor Celeste a Inter News Service luego de que durante todo el día estuvieran preocupadas por las monjas que realizan su obra en la empobrecida nación caribeña que fue azolada por un sismo de categoría 7.3 en la escala Richter, dejando terror y confusión en las calles de Puerto Príncipe.
“Gracias a Dios el lugar donde estaban no sintió los efectos del temblor, las estructuras donde estaban ellas no se afectaron”, confirmó a INS.
Sor Celeste indicó que Laguerre es la primera haitiana que forma parte de la Congregación fundada por Madre Dominga Guzmán Florit en 1949.
La Madre Superiora relató que las hermanas se trasladarán de Pignion a otra localidad donde puedan ofrecer ayuda en la nación cuya religión principal es la católica, que constituye el 60 por ciento de la población haitiana, aunque hay mucho sincretismo.
El apostolado de la congregación es servir en la Iglesia a todos los hombres, en particular atendiendo a los más necesitados, visitando a los enfermos y a los pobres, comprendida la pobreza material y espiritual, evangelizando a los niños, jóvenes y adultos, realizando obras de acción religioso-social.
De acuerdo con informes internacionales, se estima que la cifra de muertos debe estar entre 100.000 y 500.000. INS
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